Así ha sido en los últimos años. Com la rana a l’aigua bullent, no ens n’adonem, però la nostra economia s’està ensorrant. Millor dit, la está hundiendo el nacionalismo. La muestra más evidente es el PIB, que en 1980 era  un +35% superior al madrileño (19% contra 14%). Ahora el PIB de Madrid ya ha llegado al 19% y es superior al catalán. Y prepárese, que esto es solo un indicador y va a seguir así muchos años.

En febrero de 2020 avisamos de que la Fórmula 1 se preparaba para pirarse a Madrid. Bé, Expansión ens en donà notícies ahir:

«Madrid gestionará el Gran Premio de España de Fórmula 1. La capital habría llegado a un acuerdo con la competición automovilística, propiedad del grupo Liberty Media, para celebrar la primera carrera a partir de 2026 en un circuito alrededor de Ifema (…) El aterrizaje en Madrid implicaría que el Gran Premio de España dejará de celebrarse en Montmeló (Barcelona) (…)

La convivencia de dos premios en ambas ciudades es, por tanto, una opción lejana (…) prefieren una sola carrera en el calendario. No es casualidad, de hecho, que la fecha elegida para arrancar la competición en Madrid sea 2026, justo cuando acaba ese contrato del Circuit de Barcelona-Catalunya, que fue renovado por última vez con Liberty en 2021. No obstante, fuentes de la Generalitat de Cataluña indican que se mantienen negociaciones para alargar la duración de su contrato, con lo que no se da por vencida y tratará de agotar sus opciones para no perder el jugoso Gran Premio».

Resulta, per a més INRI, que qui ho ha negociat és en José Vicente de los Mozos, president d’IFEMA, resident a Barcelona molts anys i responsable també de tancar Nissan a la ciutat comtal. La Generalitat, ofuscada de nacionalisme, va perdre en el seu moment l’oportunitat de guanyar-se un executiu clau per al futur de Catalunya.

¿Qué impacto tiene esta posible pérdida para Barcelona? Unos 500€ millones en ocio, restauración, transporte o alojamiento.