Unes idees provocadores que poden ajudar a entendre lo que està passant.
Fa uns anys vam comentar les reflexions del professor William T. Cavanaugh sobre el nacionalisme i el seu funcionament com una religió:
«El nacionalismo se viene considerando una y otra vez como religión desde el clásico ‘Nacionalismo: una religión’, publicado en 1960 por Carlton Hayes, hasta los trabajos más recientes de Peter van der Veer, Talal Asad, Carolyn Marvin y otros. (…) El sentimiento de lealtad nacional excluyente sustituye a las difusas lealtades previas debidas a la región, el grupo étnico, la clase y la iglesia. Según Carlton Hayes, esta exclusividad es la que separa al nacionalismo de los otros tipos de lealtades previos. (…) El nacionalismo se clasifica como religión debido a su exclusividad. A causa de esa exclusividad -de su celo- la nación se convierte no en un simple sustituto de la iglesia, sino en sustituto de Dios».
Es a dir: reducir nuestra identidad cristiana, europea, española y catalana únicamente a la dimensión catalana es muy empobrecedor, y predicar la devoción a lanació por parte de los capellazis no es una buena idea.
No hace mucho comentamos cómo en su último libro, Migraciones de lo sagrado, el teólogo estadounidense demostraba que el nacionalismo era una creación artificial de arriba abajo. Avui ens volem fixar en altres consideracions d’aquesta mateixa obra que ens poden ajudar a entendre per què cal desconfiar de les estructures polítiques:
- «Los tipos de devoción pública anteriormente asociados con el cristianismo en Occidente nunca desaparecieron, sino que en gran medida migraron a un nuevo reino definido por el estado-nación. En este sentido, este libro pone en cuestión ciertas narrativas que presentan la modernidad como algo enteramente nuevo».
- «El liberalismo se ha convertido en el mito dominante de la edad moderna».
- «Todos los conceptos modernos del estado son conceptos teológicos secularizados, si por ‘secularizados’ uno entiende ‘encubiertos’. La historia de la muerte del Dios soberano y de su renacimiento en el estado soberano (…) es más bien la transferencia del cuidado de lo sagrado desde la Iglesia hacia el estado«.
- «La idea de que el cristianismo pertenece a un ámbito especial, al ámbito no empírico de la ‘religión’, aislado de otro ámbito de la conducta humana esencialmente distinto llamado ‘política’, es una invención que data de los comienzos de la era moderna, y que facilitó la expansión del poder civil sobre el poder eclesiástico (…) de ahí la ‘migración de lo sagrado’ -por tomar prestada una expresión del historiador John Bossy- desde la Iglesia hacia el estado».
- «Un cristiano debería sentirse políticamente huérfano en el contexto actual, y no debería considerar que la deprimente perspectiva de tener que elegir entre demócratas y republicanos, o entre izquierdas y derechas, agota las posibilidades de nuestro testimonio político».
Hi trobem també una observació clau que creiem explica lo que ha fet la Generalitat amb el Programa 2000 de nacionalistització des dels anys 1980:
«Sólo después de que se han establecido el estado [la Generalitat] y sus reivindicaciones de soberanía territorial, surge el nacionalismo para unificar culturalmente lo que ya se ha reunido dentro de las fronteras del estado«.
I acabem amb una cita del gran Walter Lippmann sobre l’absolutisme:
«No importa demasiado si el derecho a gobernar es hereditario [monarquía] o se obtiene mediante el consentimiento de los gobernados [democracia]. Un Estado es absoluto (…) cuando reclama el derecho a un monopolio de toda la fuerza dentro de la comunidad, para hacer la guerra, para hacer la paz, para reclutar ejército, para cobrar impuestos, para establecer la propiedad y privar de ella, para definir el crimen, para castigar la desobediencia, para controlar la educación, para supervisar la familia, para regular los hábitos personales y para censurar las opiniones. El estado moderno reclama para sí todos esos poderes y, por lo que respecta a la teoría, no hay ninguna diferencia real entre el alcance de esa reclamación entre comunistas, fascistas y demócratas«.
En aquest marc es podria plantejar si lo que está haciendo Pedro Sánchez es sencillamente desarrollar lo que está contenido en el Sistema del 78, i que rau també a tots els sistemes polítics occidentals basats en la sobirania il.limitada de l’estat. Un estado absolutizado cuya voluntad es ley, que no rinde cuentas a nadie, y que no tiene nada que ver con el bien común, sino con la supuesta liberación asintótica del individuo.
En los Demonios de Dostoyevski, el ideólogo Chigaliev reflexiona sobre lo que considera «libertad»: «Partiendo de la libertad ilimitada he llegado al despotismo ilimitado”. A eso parece que vamos, pastoreados por los medios del Règim, bien unciditos al yugo del poder estatal absolutizado y divinizado. Y nosotros aplaudiendo.
Dolça i tiranitzada Espanya…
Categories: Pensando bien
San-Pinóchez está fabricando la dictadura venezolana. Tal y como es. O, incluso, peor. Solo que sin la bella música y sin la sabrosa gastronomía venezolanas.
Que lástima, cuanta razón se expone en el escrito.
ojalá hubieramos aprendido alguna cosa más…
«Partiendo de la libertad ilimitada he llegado al despotismo ilimitado»…
¡Pues claro! ¿qué esperabas?
Al exigir y conseguir la «libertad», lo que realmente estamos haciendo es que los POLÍTICOS y sus amos sean más libres.
Y al ser ellos más libres (es decir, al haber nosotros destruido las trabas políticas, legales y culturales que nos protegían de ellos), ¿qué ha pasado?
Pues que al ser ellos más libres, van a asegurar su nueva posición de poder y privilegio, y se van a aprovechar de NOSOTROS.
De modo que, cuanta más libertad tenían ellos (como los líderes COMUNISTAS), mucha menos libertad teníamos nosotros (los nuevos siervos de la gleba, las masas «obreras y campesinas») hasta llegar al sueño de todo POLÍTICO, todo PHILOSOPHE y todo IVANREDONDO):
La URSS.
(y para asegurarse de que no levantemos cabeza y nos rebelemos, ¿qué hacen los POLÍTICOS?
¡Arruinarnos! hasta llegar a la pura miseria, como en Cuba, Venezuela y la URSS)
Pero todo esto viene de un error garrafal:
Cuando los ricos ILUSTRADOS exigían LIBERTAD frente al rey, nosotros creíamos que esa libertad era para todos, no exclusivamente para esa minoría privilegiada.
La Revolución francesa (y las similares en las Américas y Filipinas) era para ELLOS; nunca para sus VÍCTIMAS como nosotros.
Nosotros caímos en la trampa y les ayudamos a ser sus víctimas poniendo la carne de cañón.
En 1978 la volvimos a c.a.g.a.r, que no aprendemos.
El Sanchismo es Chavismo:
y mientras tanto berberecho feijo…. pacta con la psoeta los jueces que le tienen que juzgar jugada maestra
Sin el apoyo corrupto de franco, luego felipe, asnar, y ahora el perro, kakaluña es eso, kaka
https://okdiario.com/deportes/epico-malaga-asciende-segunda-division-gol-minuto-124-13037519
Al fastic le falto negreira, claro
Buenas tardes.
Echen un ojo a este video, que no tiene desperdicio.
Con frecurncia, con harta frecuencia, los considerados, grandes filosos, también se equivocan en sus manifestaciones.
Nacionalistas lo somos todos, desde el mismo momento que preferimos el pueblito, la ciudad o la nación, valorandola mejor que las demas..
El falso nacionalismo catalán, por ejemplo, es fanatismo revestido de falso humanismo llevado como discurso, unos desalmados para mejor tapar y seguir en sus mordidas.
Filosofar sobre todo lo demás, es como buscar originalidad a lo que solo es degeneración.
Efectivamente, pero hay que recordar que el Estado NO existe.
No hay ninguna cosa física que se llame Estado. Es una convención cultural que aceptamos sin rechistar.
Lo que llamamos «Estado» son en realidad POLÍTICOS; y cuando hablamos de políticos (porque controlan la fuerza y el dinero), realmente estamos hablando de MILLONARIOS, que sólo están protegiendo sus intereses e intentan lucrarse de los recursos de todos.
Por eso es mucho mejor, para entender lo que pasa, leer POLÍTICOS cada vez que un político dice «ESTADO».
Así, a la hora de pagar la declaración de la renta, o ir a la comisaria a denunciar un robo o hacer la cola en los comedores del hambre, hay que recordar que eso son los frutos naturales de políticas muy determinadas, no del Estado, sino de POLÍTICOS con nombres y apellidos (Pedro Sánchez, Rajoy, Zapatero, Aznar y Felipe González )…
Y por eso mismo el precio de los pisos subió por las nubes durante la Transición del gobierno del Pueblo, por el Pueblo y para el Pueblo y NO ha bajado nunca -ni va a bajar nunca-.
Así que por favor, no os dejéis engañar con estos déspotas ilustrados.
Porque su poder viene del engaño.
El R78 es en gran parte culpable de lo que tenemos. Sánchez está dando un golpe dentro del Régimen. Urge reformarlo antes de que triunfe. Somos un polígono de pruebas, están experimentando la aplicación del «estado totalitario woke», de momento, por desgracia, con bastante éxito.