En El Mundo tampoco se enteran de que el nacionalismo es también una batalla de lenguaje

Quan començaran els diaris de Madrid a prendre’s seriosament el nacionalisme?

El nacionalismo es un culto público a lanació que inventa un lenguaje para construir marcos mentales en los que encerrarnos a todos bajo apariencia de paraíso. Las palabras nacionalistas no surgen espontáneamente: son diseñadas por expertos en comunicación, publicidad y seducción de masas, pagats per tots els pepets i maries de Catalunya però al servei d’un projecte ideològic; testadas en grupos de consumidores y lanzadas al ruedo político a través de todos los medios del Règim. Esa es la tarea estratégica de Vilajoana (ex-Tiempo BBDO), en la que también colaboró Leopoldo Rodés (ex-Tiempo BBDO y creador de Media Planning).

¿Exageramos? Así explica uno de los fundadores de la ANC la invención del  dretadecidir:

“Convertimos un proyecto secesionista -que es el nuestro, es el que queríamos, nosotros queremos irnos de España- pero esto es feo, cuesta de vender(…) Y en cambio convertimos este proyecto en un proyecto de radicalidad democrática. A nosotros mismos nos chocó, pero al final de la reunión dijimos: ‘Pues sí: plataforma por el dretadecidir’”.

Pues bien, lo curioso es que hasta los periódicos de Madrid caen en la trampa de ver la realidad bajo los conceptos nacionalistas. Y hasta digitales solventes que deberían conocer bien los trucos nacionalistas se comportan como perfectos lazis y se mueven en la cárcel mental creada por los estrategas de Pujol. Es lo que le pasó hace 3 días a El Mundo, llamando «soberanistas presos» a los delincuentes nacionalistas. Aviam macos: esta gente no está en la cárcel (de hecho ya apenas lo está) por ser separatistas (lo de «soberanistas» también os lo han colado), sino por ser criminales convictos de delitos gravísimos contra la convivencia y el patrimonio.

Es lo que hace el nacionalismo: decir “catalán” en vez de “nacionalista”, para después poder decir “nacionalista” en vez de “catalán”. Compte amb les paraules, que C.S. Lewis en deia “l’arma filológica”: con ellas lleva 4 décadas colándose el nacionalismo en nuestras mentes.

Au Germán, passa’t més per Dolça.

Dolça i manipulada Espanya…

 



Categories: Huid del nacionalismo

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2 comentarios

  1. Siempre hay que recordar el riesgo de perder la batalla de las palabras, nunca está de más resaltar estos casos.

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