Dicen que le han visto con este libro, cabizbajo, leyendo en el Salón de Sant Jordi.
Son las memorias de Carles Pi Sunyer. Fue Ministro de Trabajo y Alcalde de Barcelona por ERC. Durante la guerra civil fue conseller de Cultura en el gobierno de Companys. Se exilió a Inglaterra y murió en Venezuela.
Uno que conoce bien a Artur Mas nos cuenta que tiene un párrafo obsesivamente subrayado, referido a la noche del golpe de estado del 6 de octubre de 1934. El president va repitiéndolo mientras se pasea nerviosamente por el Patio de los Naranjos:
«Todo estaba resuelto. Dentro de poco dejaríamos el Ayuntamiento. Tal vez para siempre. Y antes de dejarlo, quise volver por última vez a mi rincón de trabajo, el pequeño despacho de la Alcaldía. La impresión que me hizo fue una de las más fuertes que he tenido en mi vida. El cuadro del despacho era como la imagen de la devastación. Comenzaba a amanecer, pero el interior aún seguía en penumbra. El balcón estaba abierto de par en par; un obús hizo blanco en é, y parte de la madera estaba astillada. Los vidrios rotos, hechos añicos, en el suelo o encima de los muebles. Las cortinas rasgadas ondeaban y todo estaba cubierto de polvo. La mesa también sucia del yeso caído y de la polvareda. Al verlo pasé por uno de aquellos momentos en que uno ya no puede más. Me dejé caer en el sillón con la cabeza entre las manos, con un dolor profundo, lacerante. Era toda mi obra que se desmoronaba, la labor paciente y constante de cada día, la tarea que me había impuesto, aún no cumplida. Y de pronto, todo se hundía, de golpe, brutalmente. Y dando el último adiós al rincón preferido, me levanté para ir a enfrentarme a la última prueba y el cometido más duro de aquella noche cruel.
Al poner la bandera blanca en el balcón, no tuvimos tantas dificultades como en la Generalitat. (…) Pusimos la bandera y en seguida hice que se abriese de par en par la puerta principal. Y por allá salió un emisario a decir al jefe de las fuerzas atacantes que estábamos dispuestos a rendirnos».
Cambien a Carles Pi Sunyer por Artur Mas, el Ayuntamiento por la Generalitat, el «obús» por un burofax del Ministerio de Interior comunicándole su inhabilitación, los «vidrios hechos añicos» por la discordia catalana, las «cortinas rasgadas» por las amistades rotas, la «polvareda» por el nacionalismo, las «fuerzas atacantes» por los catalanes de seny… Y entenderán por qué Mas vaga por las galerías de la Generalitat, murmurando este texto como ido, entre espasmos y lamentaciones.
Categories: Historia, Huid del nacionalismo
No sabía que Sr Mas tuviese estreñimiento.
Sí, la verdad es que con estas lecturas a cualquiera se le afloja el vientre.
Y de paso se le puede curar el hipo.
En el País Vasco ya sucedió. Los que no pensaban igual se marcharon. Eso es lo que va a pasar en la Cataluña profunda. Esperemos que Barcelona al menos resista y se mantenga – un poco – plural. Madrid está lleno de catalanes que no aguantan más el pensamiento único.
No cabe duda, la Historia se repite, quiere Dios que sin violencia de nadie. Aunque español, y ciudadano de Cataluña, mi decisión esta tomada, me marcho de esta hermosa tierra y sus gentes, no aguanto tanta tensión, y odio inmerecido entre hermanos.
yo ya me he ido….
Pues me parece la opción más fácil, como nos rindamos todos los que no pensamos igual ¿qué será de nuestra tierra Catalunya?
Aguanta, compañero, yo tambièn siento como tú, pero no me voy a ir y pienso plantar cara a estos separatas descerebrados.Veràs como al final no lo consiguen porque no tienen ni la razòn, ni la ley de su lado. Y con la Forcadell y la Casals metidas de por medio, el desastre està cantado.
Jejeje…y…ahora dentro de poco…Mas nos saldrá emocionado…llorando…
Es un ser…sensible…amable…generoso..
Q solo piensa en no hacer mal a los catalanes…hace todo por el pueblo catalán… se sacrifica…por nosotros… no le importa quedar como un traidor a la Constitución española… ni quedar como un mentiroso falsalte…el Sr. Mas sabe q lo q nos conviene a todos…para ser felices…poder comer helado de postre todos los días…poder viajar sin escales….poder soñar y cumplir todos nuestros sueños es salir de la Unión Europea…del euro…de España…él junto con sus secuaces Erc , ANC, y todos los demás nos llevará hacia la Victoria final …
En una Nació moderna y poderosa
donde los catalanes como.dijo alguien..
Por el solo hecho de serlo tendremos toooodoooo pagado!!!
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Si leer enriquece aportando nuevas formas a tu yo, la influencia que ejercen estas lecturas en Mas, caso que lea –yo lo dudo- son negativas secuestrando su parte humana, si alguna vez la ha llegado a tener.
Sus añagazas medianamente razonadas en sus inicios, hoy suenan a rebuznos. No engañan ni a sus acólitos. Despropósitos secundados por otros pensamientos tan profanos como los suyos –Ómnium contra Cultural- convergentes en un solo punto: Hemos de destruir España y tenemos derecho a proclamarnos sus autores.
El “derecho a decidir” como muy bien dice en su libro Joaquín Leguina, es un verbo transitivo que necesita obligatoriamente un objeto directo para tener un significado, y ese complemento directo, no aparece por ninguna parte.
Si queda claro que el derecho a decidir es según el diario nacionalista, secuestrar la voluntad de los otros catalanes obligándoles y sometiéndoles a sus principios nacionalistas. Ayer, las arengas o proclamas en Plaza Cataluña, daban vergüenza y no creo que pasen sur discursos hacer historia. Dos gallináceas con pinta de brujas y sentimientos de escorpión, vomitaron embaucaciones y sueños, donde llamarlo ridículo, es lo menos.
No se dan cuenta que parte de los asistentes que ayer llenaron la plaza, en una mano llevaban la estrellada pero en su mente, perduraba el recuerdo de la tortilla y el chorizo de la abuela que en Huelva, Guadalajara o Zaragoza les hacia su abuela. Son catalanes conversos, y el converso ni suma ni resta.
Triste pero real…..y por favor, poned como salio corriendo De las.