El organismo fiscalizador critica al Gobierno autonómico por permitir al director del Catsalut compatibilizar su cargo con otros en el ámbito privado. Josep Maria Padrosa tardó un año y medio en presentar su declaración de incompatibilidad, y compaginó durante dos años y medio su responsabilidad como ‘número dos’ de la sanidad autonómica con el de apoderado de seis empresas privadas sanitarias que facturaron cantidades multimillonarias a la Generalidad.
Tal y como informa Crónica Global, la Oficina Antifraude de Cataluña (OAC) cree que la Generalidad no ejerce un control riguroso en el nombramiento de altos cargos para sus organismos públicos. Así lo expresa en un informe sobre el caso de Josep Maria Padrosa, director del Servicio Catalán de la Salud (CatSalut).
Si actúan así en las actuales circunstancias, ¿qué no harían en una hipotética República Independiente, Corrupta y Bananera de Cataluña?
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