Visiten totes les parròquies de Catalunya i adoren el Nen Jesús.

Hoy ha sido enterrado Benedicto XVI tras un funeral que ha llenado la plaza San Pedro, com en els seus temps de papa i els de Joan Pau II. No estaban los actuales reyes de España, que de príncipes se pirraron por asistir a la vigilia con Benedicto XVI cuando vino a la JMJ de 2011. Tampoco estaba el rey emérito, al que le encantaba posar con el finado siempre que visitaba España. Ambos reyes corrieron hace poco al entierro de Isabel de Inglaterra, pero deben estar ocupadísimos estos días de Navidad per exercir la seva tasca de representació. Sembla que ens diguin que els cristians espanyols no tenim rei; ells s’ho perden, y nosotros lo ganamos, porque nos acercamos más al Rey de reyes que estos días nace en la pobreza, alejado de los centros de poder y perseguido por los reyes del mundo.

Y se nos mezclan hoy pensamientos sobre reyes: el rey Herodes y los reyes mundanizados, el Rey de reyes, y los sabios Reyes Magos. Un año curioso este 2023.

Celebramos la fiesta de los Reyes Magos porque celebramos esto:

«Jesús nació en Belén de Judá en tiempos del rey Herodes. Entonces, unos Magos de Oriente se presentaron en Jerusalén preguntando: ‘¿Dónde está el Rey de los Judíos que ha nacido? Porque hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo (…) Entraron en la casa, vieron al niño con María, su madre, y cayendo de rodillas lo adoraron« (Mateo 2, 1).

Herodes es el rey de los judíos que reina gracias al emperador romano, con la pretensión -dice Benedicto XVI en La infancia de Jesús– de ser el redentor para el reino judío. Pero es un salvador falso, un impostor que tima a su pueblo con embelecos que no están a su alcance. Es la divinización del poder político, la sacralización de la ideología, que en el caso del nacionalismo nos promete gelatdepostrescadadia si adoramos la cubana. És el rei secular que no reconeix res per damunt la seva corona.

Frente a este poder se presentan los magos, que

«no eran únicamente astrónomos. Eran ‘sabios’; representaban (…) un dinamismo que es búsqueda de verdad, la búsqueda del verdadero Dios (…) representan el camino de las religiones hacia Cristo, así como la autosuperación de la ciencia con vistas a Él. (…) estos hombres son predecesores, precursores, de los buscadores de la verdad, propios de todos los tiempos. (…) 

La promesa contenida en estos textos extiende la proveniencia de estos hombres hasta el extremo Occidente (Tarsis-Tartesos en España), pero la tradición ha desarrollado ulteriormente este anuncio de la universalidad de los reinos de aquellos soberanos, interpretándolos como reyes de los tres continentes entonces conocidos: África, Asia y Europa. El rey de color aparece siempre: en el reino de Jesucristo no hay distinción por la raza o el origen. En él y por él, la humanidad está unida sin perder la riqueza de la variedad«. (Benedicto XVI: La infancia de Jesús, c.IV).

Pues no deja de ser curioso: unos hombres venidos de España que representan la  unidad en la diversidad, y la búsqueda de la verdad más allá de ideologías y gelatdepostres. Y también es curioso que nacionalsocialistas se extasíen con una diversidad que los católicos tenemos nuestra desde hace 2.000 años. Devien de ser ben dolços, aquests reis.

I aquesta nit arribaran arreu d’Espanya i del món per deixar regals a tothom en nom del Nen Déu, como lleva sucediendo desde hace 2 milenios.

Ens arriba un vídeo de l’arribada de Ses Majestats a Sarrià, donde han sido recibidos en la parroquia a reventar de familias, cantos y alborozo. Nada que ver con el magro aplec de amargados vejetes catabatasunos de 20 años y resentidos musulmanes que hoy celebran el aquelarre «Festa Anti-Reis» en Manresa sin niños y supurando odio, pobrets.

Los Reyes Magos han asistido a misa, comulgado, recibido a todos los niños y repartido regalos. Abans però han demanat a tothom que aquest any estiguin ben a prop del Salvador que dorm en un pessebre d’animals.

Feliç vetlla de Reis, dolços!

Categories: Alma, Tradiciones

Tags: Reyes Magos