El cesaropapismo llega a la Generalitat?
Parece que el Departament de Governació de la Generalitat ha aprobado una partida de €900.000 para el «fomento y difusión de la cultura y la realidad religiosa», y «promover el diálogo interreligioso como herramienta para la convivencia y la edición de libros de temática relacionada con el hecho religioso». La primera partida, de 600.000 euros, se gastará en el 2014 y el resto, en 2015.
La Generalitat y las administraciones públicas deben dedicarse a lo suyo, que es gobernar inmiscuyéndose lo menos posible en la vida de la sociedad civil. Quien ha de fomentar «la cultura y la realidad religiosa», y «promover el diálogo interreligioso» son los religiosos. Los poderes públicos no tienen nada que hacer, salvo facilitar la actuación de la Iglesia en sus ámbitos. Dad al César lo que es del César, y a Dios lo que es de Dios.
Resulta extraño que la Generalitat laicista de CiU (apoyada por ERC) se dedique ahora a la catequesis. A no ser que el verdadero propósito sea controlar a la Iglesia y fomentar la ideología en su interior. La ideología nacionalista, claro.
Preparémonos para una avalancha de libros, conferencias y ponencias sobre el papel de la Iglesia en la «construcció del fet nacional» desde 1714.
Y es que hemos comprobado muchas veces que a la Generalitat sólo le interesa la Iglesia como vehículo de transimisión de nacionalismo.
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