El «líder» ha hundido la villa que gobierna.
Oriol Junqueras es presidente de la independentista ERC, y alcalde impresentable (en el sentido de que nunca está por ahí) de la localidad barcelonesa de Sant Vicenç dels Horts. El que aspira a liderar la Cataluña independiente ha sido incapaz de administrar su villa, cuyo déficit está descontrolado y cuya tasa de paro es una de las más altas de Cataluña (22%). Más concretamente, sólo en facturas pendientes de pagar el pueblo que gobierna Junqueras adeuda 373.000 euros.
Sin ningún rubor y olvidando el pundonor independentista, Junqueras se ha acogido como alcalde al Tercer Plan de Pago a Proveedores promovido por el Ministerio de Hacienda del Gobierno de España. ¿Por qué no pedir dinero a la Generalitat, o subir impuestos en su localidad, que es lo que tendría que hacer en caso de independencia? La respuesta es sencilla: la Generalitat no tienen un duro, y no precisamente por el “expolio” de «España», sino por la pésima gestión de los nacionalistas durante tres décadas. La Generalitat, esa que quiere separarse de España, sigue mamando de las ubres del Estado, beneficiándose del apoyo financiero del Fondo de Liquidez Autonómico, créditos ICO y planes de pago a proveedores hasta sumar una cifra de 25.000 millones de euros en los dos últimos años. Gracias a estas ayudas del Estado Español, la Generalitat está evitando la quiebra.
Y a pesar de ello, Oriol amenaza con quebrarla mediante un paro general.
Ay, nuestra dulce Cataluña…
Categories: Economía
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