Padecía «accesos fugaces de locura». Lo cuenta El Español de Pedrojota: como a tantos otros jóvenes, a Juan Rufián Cano, abuelo de nuestro Juanga, le tocó la mili en Melilla a mediados de la década de los 40. El hombre… Leer más ›
Padecía «accesos fugaces de locura». Lo cuenta El Español de Pedrojota: como a tantos otros jóvenes, a Juan Rufián Cano, abuelo de nuestro Juanga, le tocó la mili en Melilla a mediados de la década de los 40. El hombre… Leer más ›