Un santàs molt relacionat amb Catalunya.
Hoy celebramos los 503 años de la conversión de San Ignacio de Loyola, el menor de 12 hermanos, caballero y militar, soldado de Carlos I, evacuado del sitio de Pamplona con la pierna destrozada, obligado a una larga recuperación en el caserón de Azpeitia, donde leyendo vidas de santos se dio cuenta de que la vida es una elección: luchar bajo la bandera del Rey Jesucristo o bajo la de Satanás de Babilonia. Ya recuperado pero cojo, lo dejó todo y se vino andando a Barcelona, con ánimo de embarcarse para Tierra Santa. A casa nostra va vetllar armes davant la Mare de Déu de Montserrat (encara s’hi pot veure la rèplica de l’espasa), va escriure els fabulosos exercicis espirituals a la cova de Manresa y mendigó en las gradas de Santa María del Mar. Hoy a la Cueva apenas va nadie, que los catalanes tienen otro idolillo y seguramente haya ya más manresanos musulmanes que católicos.
Más tarde fundaría en Montmartre la Compañía de Jesús, caballería ligera del Papa, frontera ante la herejía y vanguardia de evangelización y ortodoxia, perseguidos por déspotas e iluminados… hasta que el modernismo penetró también en sus filas y la mundanizó, inutilizando buena parte de sus obras y reduciendo sus efectivos a menos de la mitad en apenas medio siglo.
A Catalunya devem molt a la Companyia, però també hem vist la seva decadència en la idolatria nacionalista. ¿Cómo olvidar, por ejemplo, al padre Enric Puig, Director General de Juventud con Pujol y encargado de convertir las escuelas cristianas en madrasas lazis mediante el Programa 2000 de nacionalistización total? Puig dirigió la comisión «Església» de dicho Programa, y fue miembro de la comisión «Societat Civil». Sense aquest nefast jesuïta segurament encara hi hauria escola cristiana a Catalunya, y los colegios jesuitas no serían hoy franquicias educativas para proveer flujos de caja a la Compañía.
El gran Víctor Cucurull y su Institut Nova Història afirman que San Ignacio de Loyola era en realidad Sant Ignasi d’Oriola (Orihuela, Alicante): un català dels Països Catalans, és clar. Cuando llega la decadencia nacionalista, llega a todas partes.
Potser ens ajudarà avui recordar el gran Sermó de Dues Banderes, referent dels Exercicis Espirituals de Sant Ignasi escrits a Manresa, per entendre de què va la lluita dolça. Porque en la vida hay 2 banderas:
«la una de Cristo, sumo Capitán y Señor nuestro, la otra de Lucifer, mortal enemigo de nuestra humana natura. (…) Cristo llama y quiere a todos debajo de su bandera, y Lucifer, al contrario, debajo de la suya.
El primer punto es imaginar, así como si se asentase el caudillo de todos los enemigos en aquel gran campo de Babilonia, como en una grande cátedra de fuego y humo, en figura horrible y espantosa. El considerar cómo hace llamamiento de inumerables demonios, y cómo los esparce a los unos en tal ciudad y a los otros en otra, y así por todo el mundo, no dejando provincias, lugares, estados, ni personas algunas en particular. El considerar el sermón que les hace, y cómo los amonesta para echar redes y cadenas; que primero hayan de tentar de cobdicia de riquezas, como suele, “ut in plúribus”, para que más fácilmente vengan a vano honor del mundo, y después a crecida soberbia; de manera que el primer escalón sea de riquezas, el 2.º de honor, el 3.º de soberbia, y destos tres escalones induce a todos los otros vicios. (…)
El considerar el sermón que Cristo nuestro Señor hace a todos sus siervos y amigos, que a tal jornada envía, encomendándoles que a todos quieran ayudar en traerlos, primero, a suma pobreza espiritual, y si su divina majestad fuere servida y los quisiere eligir, no menos a la pobreza actual; a deseo de oprobrios y menosprecios, porque destas dos cosas se sigue la humildad; de manera que sean tres escalones, el primero pobreza contra riqueza, el 2.º oprobrio o menosprecio contra el honor mundano, el 3.º humildad contra la soberbia, y destos tres escalones induzgan a todas las otras virtudes”.
Es curioso descubrir en el nacionalismo el humillo azufroso de la codicia (3-5-10%) y la soberbia (somcollonuts), que segons Sant Ignasi són inici de tots els vicis, i les característiques de la bandera de l’infern. Que malgrat les nostres imperfeccions, no serà mai la dels dolços.
Que Sant Ignasi ens faci pobres, senzills i humils. Bona diada de Sant Ignasi i felicitats a tots els Nachos!
Dolça i ignaciana Catalunya…
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Maravilla de entrada.
Lo mejor de San Ignacio es » el ateo no puede creer en Dios , porque su mente es incapaz de admitirle×
Decía el escritor y filósofo alemán Novalis, que «En ausencia de Dios reinan los fantasmas». Pero claro, ese señor no era un ilustrado, sino un proto-romántico. No pienses en Dios, sientelo en tu interior, y para sentirlo, abre los ojos de tu corazón, porque sólo con los ojos del corazón podrás contactar con el Espíritu eterno, que es parte de ti mismo. Para lograrlo, sitúa una nube negra de olvido entre tu cuerpo mundano y Dios. Recuerda que el no saber es de sabios, y olvida todo lo que te he dicho. No es tan difícil.
No sé porqué la Llaman Orden, si es el orden más inexacto; no es un ejército al servicio del Papa; son guerrilleros de sus causas individuales; demasiadas veces poco edificantes.
Éso sí, todos confluyen mayores a su casa “de cierre de vida y esperanza”..
Sí; mejor es llamarla «des-orden».
Aunque es un abuso meter aquí el nombre de San Ignacio, que no tiene nada que ver con esta topa.
Son arrupistas del montón, aunque es cierto que se creen mejor que el Pueblo, porque siguen siendo tan elitistas hoy como antes; sólo que si hasta el Concilio eran ejemplo de sabiduría y santidad, hoy son la punta de lanza del mal.
¿Y como han acabado los jesuitas? Apoyando en la, 2ª mitad del s XX y en lo que llevamos del XXI las dictaduras rojas conectadas con el narcotráfico, defensores de la emigración de sustitución ¿se piensan que convertirán a algun mena?, y seguro que acabarán defendiendo el aborto masivo, la eutanasia, la pedofilia, la, adopción pir homosexuales… En la, línea de los altos funcionarios que no jerarquías. En fin, que pena…
Olvídate de los jesuitas y pásate al bando de los de San Pancracio!. Ya sabes, el de los cinco duros y el perejil. Las satisfacciones terrenales no están reñidas con los asuntos del Reino Celestial.
Dulce y santurrona Cataluña!
¿por qué «santurrona»?
¡Ahora nos vas a salir tu un ilustrado!
Cada cual cree en lo que Dios quiere -y cosecha las consecuencias-.
La religión es una función natural del hombre y si desaparece automáticamente será sustituida por otras religiones, ya sean falsas, como el marxismo, o verdaderas, como el Islam.
Por tanto, si no sabes cuales son las consecuencias de tu postura, respeta al menos, que tu no eres mejor que los demás.