L’autor d’Un món feliç ho tenia clar.
Aldous Huxley fue un escritor británico educado en Eton. El seu avi va ser biòleg evolutiu, la seva mare una de les primeres dones en estudiar a Oxford, su tío abuelo era poeta, tuvo un hermanastro premio Nobel de medicina, otro hermano se suicidó… Als 16 anys es va quedar quasi cec d’un ull. Ejerció de profesor en Eton, publicó poesía, visquè a Itàlia y en sus novelas le gustaba fustigar a la burguesía británica. Viajó por todo el mundo. España la visitó en coche en 3 ocasiones, la última en 1933; coneixia Barcelona, on hi va anar per a un Congrés. En 1932 publicó la conocida distopía Un mundo feliz. En 1937 se instaló definitivamente en EE.UU.
Su retrato de Hollywood y la vida en California quedan capturados en Muere el cisne después del verano, de 1939, donde hallamos una interesante observación en labios de William Propter, el personaje en que se desdobla Huxley. Meditando sobre los temporeros de la fruta que llegan de Kansas para trabajar por pocos peniques en la naranja, dice esto:
«Algo debe de poderse hacer por individuos como el hombre de Kansas, algo que no implique el uso de perjudiciales falsedades acerca de la naturaleza de las cosas. La falsedad, por ejemplo (…) que afirma que los humanos valores son absolutos y que Dios es la nación o el partido o la totalidad de la raza humana».
Una gran definició de totes les ideologies com a falses religions, entre elles el nacionalisme: divinizaciones de cosas que no lo son. Lanació, el mundo, la tierra, la mujer, la raza, el partido, el hombre… cosas muy bonitas pero que no son absolutas, sino solo una parte de la rica y compleja realidad. Absolutizarlas perjudica al hombre, especialmente a los más humildes.
Disfrutemos de la verdad de las cosas. Superem el nacionalisme.
Dolça i divinitzada Catalunya…
Categories: Pensando bien
Las religiones se niegan unas a otras, pues son fruto de la inventiva de unas personas determinadas. Pero Dios es UNIVERSAL, Y, como tal, no representable de manera gráfica. Podemos llamarle como nos plazca o, en cada caso, como las distintas creencias lo llamen. Pero Dios so0lo hay uno.
Preciosa entrada.