Para los catalanes es natural amar a Cataluña y a toda España.
Nacionalismo y cosmopolitismo son ideologías artificiales alejadas de la experiencia normal del hombre. Cualquier padre sabe que lo que hace por sus hijos es impagable. Por eso amar a nuestros padres y sus cosas es natural. Aplicado por extensión a la comunidad próxima que acogió nuestros primeros años y comparte nuestro destino se llama patriotismo.
Torras y Bages, obispo de Vich a principios del siglo XX y uno de los impulsores del regionalismo, era devoto del Corazón de Jesús. Escribió un librito para celebrar el mes de junio, dedicado especialmente a esta devoción: el Petit mes del Sagrat Cor de Jesús. El libro mantiene su actualidad y muchos católicos lo usan para refrescar su alma estos días.
Cada día del mes, Torras y Bages ofrece una pequeña reflexión. La del día 16 está dedicada a «Estudiar en el Corazón de Jesús el amor a los padres, a la patria y a los amigos»:
«También descubrirás, cristiano en el Corazón de Jesús, un gran amor a la patria. Hijo de Judea, lloró con amarguísimas lágrimas su perdición e hizo cuanto pudo para salvarla. (…) Procuró por todos los medios la salvación de su pueblo. (…) ¡Oh Corazón perfectísimo del buen Jesús!, rectificad todos nuestros sentimientos y enseñadnos la manera cómo hemos de amar a la patria, en la cual nos habéis hecho nacer, y cómo hemos de cumplir las obligaciones que con ella tenemos. Ruega, pues, cristiano de un modo particular, por España, y pide al Sagrado Corazón que derrame sobre ella los tesoros de su fe y las finezas de su amor«.
No sabem si els nacionalistes i els capellans del Front Nacionalista (Joan Costa, Novell, Bada, abat Soler, monja Forcades i altres montserratistes) segueixen els consells del venerable Torras i Bages. Nosaltres sí que ho fem: «Sagrat Cor de Jesús, vesseu els tresors de la fe i les fineses del vostre amor sobre Espanya, i preserveu-la de la discòrdia».
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Ya que se habla de científicos , ¿alguien me podría facilitar los Premios Nobel españoles?. O la fuente a la que acudir
Vicente Aleixandre, Jacinto Benavente, Camilo José Cela, José de Echegaray, Juan Ramón Jiménez y Mario Vargas Llosa (peruano nacionalizado español, con doble nacionalidad). Santiago Ramón y Cajal y Severo Ochoa (nacionalizado estadounidense, conservó la doble nacionalidad). En total siete. De ellos dos por motivos científicos. Lamentablemente la ciencia española, a partir del siglo XVIII, entró en una decadencia brutal. Tal vez nos sirva un dato. Fernando VII, el más infausto de los reyes españoles, cerró la Universidad. Su hija Isabel II las reabrió. En 1855. Pues bien en ese año había en España más de 6.000 pueblos sin escuela. Tres años más tarde en toda España sólo había 53 institutos de enseñanza secundaria o bachillerato, con sólo unos 10.000 alumnos. En las diez universidades españolas había algo más de 6.000 alumnos, y puede llamar la atención que una gloria de España como Salamanca sólo tuviera 100 alumnos en sus cuatro facultades. Del total de estudiantes universitarios de toda España, unos 3.500, más de la mitad, estudiaba Derecho, que era la salida natural: la Administración. La otra salida era el Ejército. Isabel II fue una pésima gobernante, pero tampoco debemos olvidar lo que fue el siglo XIX que empezó con la inmensa ruina y deuda que supuso para España la Guerra de Independencia, que entre otras cosas motivó la emigración gallega. De paso indicar que la segunda emigración en proporción más fuerte fueron la catalana y la vasca. Lo que puede indicar como quedaron las economías de las zonas, porque se emigra por pobre, no por rico.
José Luis Comellas ha realizado una contabilidad del XIX y sale lo siguiente: 130 gobiernos; 9 Constituciones, votadas o no; 3 destronamientos; pérdida del Imperio; 5 guerras civiles; 40 pronunciamientos liberales y 4 absolutistas; decenas de regímenes provisionales y más de 2.000 revoluciones y alzamientos. Con esos mimbres comenzó a forjarse el independentismo catalán, más los mitos racistas y la invención de una neohistoria y la pasada de Bofarull por el ACA con la desaparición de documentos que ello llevó consigo más la manipulación de otros al publicarlos.
Y la monja Forcades ha sido criticada por numerosos científicos. No es más que una conspiranoica. De paso esa teoría anti vacunas está provocando el repunte de enfermedades controlables con vacunas en USA, lugar donde todo fanatismo, especialmente anti científico, tiene asiento. No olvidemos que la categoría de un científico se mide por sus publicaciones en medios especializados que permitan el contraste por parte del resto de la comunidad científica. Pues en el caso de la Forcades no se sabe que haya intervenido en proyectos de investigación ni publicado artículo científico alguno.
Gracias por la información facilitada.
Lo del Siglo XIX, es increíble . Aunque se sepa lo mal que nos fue , al ver los números resumidos no se entiende gracias a que, hemos salido de ese pozo. Voluntad de salir de todos los ciudadanos ha tenido que haberla , pero también la había antes .
En fin, alguna cosa ha habido , se pueda o no decir.
La monja Forcades nunca rectificó sobre la idoneidad de la vacunación antigripal, negándola, en la última pandemia de gripe A H1N1. Bien al contrario , lo mantiene a lo largo del tiempo en charlas mil, haciendo gala de una verborragia incontenible posicionandose con movimientos antivacunación. Esta monja no recuerda que entre los mayores logros obtenidos por la humanidad en materia sanitaria están el abastecimiento de agua limpia y la vacunación . No nos extraña que esta monja de vida contemplativa, que no sabemos de dónde saca el tiempo para la contemplación, nos comunique que ha votado a PODEMOS de Pablo Iglesias.
Hay que añadir a la lista a la monja Caram, benedictina como la monja Forcades, de origen argentino y apasionada defensora de la política de Mas. Tampoco hay que olvidar al monje de Montserrat Hilari Raguer docto defensor de la autodeterminación de Cataluña y estudioso de Carrasco i Formiguera…No se que tendrán las paredes de Montserrat para albergar a tanto nacionalista insensato. La última de la monja Forcades es el haber votado, según confesión suya, a Podemos y a Pablete Iglesias. La monja Forcades debe tener algún problema serio de personalidad: médico de formación y diplomada en EEUU en salud pública, durante la pasada pandemia de gripe A, en plena campaña de estudio y prevención, se dedicó a difundir peligrosos mensajes antivacunación y a delatar maniobras conspiratorias de los laboratorios productores de la vacuna antigripal.
El Gran Torras i Bages, qué pocos catalanistas han leíso «La Tradicio Catalana». Venga, animaros, leed