Què fa un meganazi amb carrer a Barcelona?
Sabino Arana vino pasó una temporada de su juventud en Barcelona. Aquí aprendió el nacionalismo y decidió implantarlo en el País Vasco; también aquí se dio cuenta de algo:
“Dice La veu de Catalunya que los catalanes son hermanos nuestros de desgracia, y que también somos en el mismo concepto de los baleares, los valencianos y los gallegos. (…) fraternidad de desgracia; porque, en efecto, fraternidad de raza no la hay entre aquellos españoles y nosotros, como no seamos también hermanos de los coreanos. (…) Pero tampoco somos hermanos de desgracia, (…) porque la desgracia de los catalanes (…) y la nuestra no se parecen en lo más mínimo. Los catalanes perdieron las leyes privativas de su región; nosotros hemos perdido nuestra nacionalidad e independencia absoluta. (…) No es razonable la alianza de los catalanes y los vizcaínos; pues no son semejantes los sujetos Vizcaya (Bizkaia) y Cataluña, ni se parecen por su desgracia; ni tienen un enemigo común; ni son las mismas sus aspiraciones. (…) Equiparar nuestro derecho a constituir nación aparte, con el derecho que le sirviera de base al nacionalismo catalán, sería rebajar el nuestro. (…) Nunca discutiremos si las regiones españolas como Cataluña tienen o no derecho al regionalismo que defienden; porque nos preocupan muy poco, nada por mejor decir, los asuntos internos de España. (…) No escribimos nuestro periódico para hablar de política extranjera, sino para instruir a los vizcaínos. (…) Jamás confundiremos nuestros derechos con los derechos de región extranjera alguna, (…) jamás haremos causa común con las regiones españolas.” (Sabino Arana: Obras completas, Sendoa, San Sebastián 1980, p.405).
“Cataluña es española por su origen, por su naturaleza política, por su raza, por su lengua, por su carácter y por sus costumbres. Ustedes, los catalanes, saben perfectamente que Cataluña ha sido y es una región de España, (…) una región con caracteres de nacionalidad. (…) Maketania comprende a Cataluña; (…) maketo es el mote con que aquí se conoce a todo español, sea catalán, castellano, gallego o andaluz.” (idem, pp. 686, 1.391, 1.369).
Molt simpàtic, el boig d’en Sabino. Al nacionalisme català li agrada tant aquest fanàtic inventor del PNB que fins i tot li han posat un carrer a Barcelona. Però no acaben d’aprendre el missatge de l’Arana: Catalunya és Espanya. Li ho diu el fundador del nacionalisme basc.
Más allá de esto, su pensamiento es más racista, xenófobo, supremacista y genetista que el de los nazis, però ningú encara no ha demanat perdó a Vascongades, i encara té un carrer a Barcelona.
Aquestes són algunes de les joies que va escriure en Sabino:
Bizkaitarra, nº 29:
«El bizkaino es de andar apuesto y varonil; el español o no sabe andar, o si es apuesto, es tipo femenino».
Bizkaitarra, nº 19:
«Es preciso aislarnos de los maketos».
La Patria, nº 39:
«Nosotros, los vascos, evitemos el mortal contagio, mantengamos firme la fe de nuestros antepasados y la seria religiosidad que nos distingue, y purifiquemos nuestras costumbres, antes tan sanas y ejemplares, hoy tan infestadas y a punto de corromperse por la influencia de los venidos de fuera».
Bizkaitarra, nº 10.:
«Ya hemos indicado, por otra parte, que el favorecer la irrupción de los maketos es fomentar la inmoralidad en nuestro país; porque si es cierto que las costumbres de nuestro Pueblo han degenerado notablemente en esta época, débese sin duda alguna a la espantosa invasión de los maketos, que traen consigo la blasfemia y la inmoralidad».
Bizkaitarra, nº 22:
«¡Cuándo llegaran todos los bizkainos a mirar como enemigos suyos a todos los que les hermanan con los que son extranjeros y enemigos naturales suyos!»
Bizcaitarra, nº 27:
«Gran numero de ellos parece testimonio irrecusable de la teoría de Darwin, pues más que hombres semejan simios poco menos bestias que el gorila: no busquéis en sus rostros la expresión de la inteligencia humana ni de virtud alguna; su mirada solo revela idiotismo y brutalidad».
Baserritarra, nº 11:
«El roce de nuestro pueblo con el español causa inmediata y necesariamente en nuestra raza ignorancia y extravío de inteligencia, debilidad y corrupción de corazón».
Bizkaitarra, nº 29:
«La fisionomía del bizkaino es inteligente y noble; la del español inexpresiva y adusta. El bizkaino es nervudo y ágil; el español es flojo y torpe. El bizkaino es inteligente y hábil para toda clase de trabajos; el español es corto de inteligencia y carece de maña para los trabajos más sencillos. Preguntadselo a cualquier contratista de obras, y sabréis que un bizkaino hace en igual tiempo tanto como tres maketos juntos».
Bizkaitarra, nº 29:
«El bizkaino es laborioso; el español perezoso y vago».
Bizkaitarra, nº 29:
«Oídle hablar a un bizkaino, y escuchareis la más eufórica, moral y culta de las lenguas; oidle a un español, y si solo le oís rebuznar, podéis estar satisfechos, pues el asno no profiere voces indecentes ni blasfemias».
Bizkaitarra, nº 11:
«Etnográficamente hay diferencia entre ser español y ser euskeriano, la raza euskeriana es sustancialmente distinta a la raza española».
Podríem continuar però ja n’hi ha prou per entendre que en Sabino Arana era un immens perol on l’odi i el racisme feien xup-xup. Normal que el nacional-socialisme que mana a Catalunya sigui fan d’un personatge com aquest… però de debò ha de tenir un carrer a la nostra ciutat? Lo que no se entiende es que las feministas estén encantadas.
Este sábado la imparable Convivencia Cívica Catalana recoge firmas en la plaza de Sarriá para cambiar el nombre de la calle por el de otro vasco, Miguel Ángel Blanco. Allí nos vemos.
Dolça i racista Catalunya…
Categories: Huid del nacionalismo
También habría que cambiar el nombre del Estadio Olímpìco de Montjuïc, en Barcelona y el de otrtos lugares que lleven el de lluis Companys, por nombres de personajes que hayan hecho algo bueno para todos. (Companys no hizo NADA bueno para Cataluña)
¿Sabino Arana «genetista»?
Será más bien que ese paleto integrista era antigenetista. Mitómano más bien. O incluso «narcisista del copón»
(a ver si no en quién está pensando el jaún sino en él y los de su clase cuando pone por las nubes y arrastra por el barro a unos y otros)
La genética dice sin ninguna duda que los vascos son mestizos y que los españoles tienen los mismos genes que ellos.
También la genética dice que del ADN no se puede sacar ningún atributo moral, religioso de clase. No existe eso.
Por cierto, que Carl Jung, con su teoría de la sombra o «shadow», explica muy bien que los rasgos racistas de este energúmeno son en realidad propios, solo que una fuerte censura interna los proyecta sobre otros.
Por tanto tampoco sale muy bien parado desde la psicología y la salud mental.
Parece que una vez más se cumple la maldición humana de elegir como líderes a enfermos mentales de mirada fija y emociones fuertes.
(para llevarnos al huerto, se entiende)
Yo siempre confundía la calle de Sabino Arana con la calle de Francesc Aranda.
Arana y Aranda.
La calle de Francesc Aranda se denominó así hasta octubre de 1995. Desde entonces se denomina calle de Ramon Trias Fargas.
«Ramón Trías Fargas (Barcelona, 27 de diciembre de 1922 – El Masnou, 22 de octubre de 1989) fue un político español de ideología nacionalista catalana.» (Fuente: Wikipedia).
De ideología nacionalista catalana. ¡Qué curioso! ¡Qué pinche curioso! (como dicen los mexicanos). Poniendo nombres de «indepes» en las calles de Barcelona. ¡Cuánto daño ha hecho el pujolismo (1980-2003)!
Yo recuerdo que la calle se llamaba «carrer de Francesc Aranda». «Francesc», en lugar de «Francisco». Como siempre, catalanizándolo todo.
«Francisco Aranda (Caracas, Venezuela, 18 de mayo de 1798 – Ibídem, 26 de octubre de 1873) fue un abogado y legislador venezolano.» (Fuente: Wikipedia).
«Francisco de Aranda (Teruel, 1346 – Portaceli, 1438) fue un caballero y cartujo aragonés.» (Fuente: Wikipedia).
Más bien debió ser el venezolano Francisco Aranda.
«Sabino Arana» suena tan feo que me recuerda a Joaquín Sa.bi.na; Sabrina, cosas de brujas y las te.tas de Sabrina Sa.ler.no.
Los euskonazis odian a todos los españoles, en particular a los del Este y el Sur, que son considerados por los euskonazis como más moros aún que los maketos. Sin embargo a los catanazis les cae la baba delante de los euskonazis. No cambiaran el nombre jamás. Aún más, pronto habrá una calle dedicada a Josu Ternera. Al tiempo.
Una manera fácil de sentirse superior es rebajar a los que te rodean y declararles «inferiores».
Bueno, es humano; no voy a tirar yo ahora la primera piedra.
Lo que es mucho más raro es que la Iglesia Católica lo ampare, porque el racismo y ese odio por nada van directamente en contra de la Ley de Cristo.
Mucho más raro todavía es que Moncloa les ría la gracia -a cambio de votos, naturalmente-
Es lo que podríamos llamar «rajoyismo cortoplacista de largo alcance»
No creo que mediante ese sistema se recojan muchas firmas … Está anticuado. Hoy se hace mediante internet para llegar a millones de personas y obtener así decenas de miles.
De todas formas intentaré aparecer por allí.
Están Sabino Arana, Txapote, Urkullu, y la madre que parió a todos los salvapatrias de todas las tribus éuskeras, como para dar lecciones de virilidad, de bonhomía, y hasta de decencia. El estadismo es incompatible con el tribalismo terruñero.
Hace poco le pregunté a Dña. Mª Mar Blanco Garrido, con todo respeto, que qué le parecía que el PP siguiera dándose el pico con los de Bildu que tanto sacuden el árbol. Debe estar muy ocupada porque no ha condescendido a responderme.
Apoyo a CCC., para que el Ayuntamiento de Barcelona, dedique esa calle a Miguel Angel Blanco (DEP)., y se la quite al tarado impotente y maligno de Sabino Arana. Aunque no creo ni que recojan suficientes firmas, ni que el alcalde sea un hombre de honor. Aparte que los barceloneses están a otras cosas, como decir «mersí».
Aparte que gracias a la peperada, Miguel Angel Blanco, lo mismo se piensan que fue un futbolista de la Farça o algo así.
Los tiros en la nuca y las bombas bajo el coche son signos de «virilidad»…
Las palabras del Sabino me recuerdan a las del Torra no hace mucho tiempo…
«ahora miras a tu país y vuelves a ver hablar a las bestias. Pero son de otro tipo. Carroñeros, víboras, hienas. Bestias con forma humana, sin embargo, que destilan odio. Un odio perturbado, nauseabundo, como de dentadura postiza con moho, contra todo lo que representa la lengua. Están aquí, entre nosotros. Les repugna cualquier expresión de catalanidad. Es una fobia enfermiza. Hay algo freudiano en estas
bestias. O un pequeño bache en su cadena de ADN. ¡Pobres individuos! (…) Tienen nombre y apellidos las bestias»
Por cierto, qué ha sido de este impresentable ex-presidente de la Generalidad ? Me imagino que seguirá chupando del bote en algún carguito hecho a medida para su corta inteligencia, no ?
Saludos dolços
Es muy curioso, porque las dos ideologías racistas, siendo hijas de la leyenda negra anticatólica y antiespañola, tienen puntos en común y puntos en contra (para cada una, la otra es el epítome de lo que está mal)
Curiosamente la receta, que es la misma (la separación) acaba también en lo mismo (regímenes privilegiados por los «infrahumanos» y su mercado).
Más curioso todavía es cómo la ciencia (el estudio del ADN) y la economía (los evidentes beneficios de un mercado y una lengua comunes) les resbalan como el agua sobre un impermeable. Aunque, eso sí, sin dejar de aprovecharse de «Madrid».
Lo asombroso es que ideologías basadas en la raza han invadido sus regiones con marroquíes, que tienen otra raza.
(y más asombroso todavía, que los (ex) muy católicos vascos se hayan colonizado con muy islámicos fundamentalistas).
Tal vez el asombro sería menor si nos diésemos cuenta que en algún momento de la Transición los democratacristianos exfranquistas y los jesuitas dieron a los nacionalistas una fuerza social que no tenían, pero que supieron aprovechar muy bien -de acuerdo con sus mitos fundacionales-
Como sus mitos fundacionales eran falsos, sus políticas fueron equivocadas.
Hasta hoy.
Pero si las mismas estupideces perduran en el tiempo es porque alguien (los políticos) se benefician de ello.
Para este desastre no necesitábamos «democracia».
Y la avenida Diagonal, «avinguda de Santiago Abascal».
Pues como sigamos con este desastre, el que pueda pararlo bien se merece una calle o dos.
¿Santiago Abascal?
Cualquiera que traiga democracia, industria y sentido común.