Un partit que ja no serveix.
En 2017 pasó lo que se estaba preparando desde que en 1980 llegó Pujol al poder. Llegó el «demà» del lema que coreaban los nacionalistas desde fines de los años 70: «avui paciència, demà independència». La «paciència» va consistir en anar construint estructuresdestat amb les transferències d’uns partits «nacionals» incapaços de anteponer el bien común a sus propios intereses, y en llenar de propaganda lazi las cabezas y los corazones de los catalanes con el aplauso de la Moncloa.
Cualquier español despierto que raciocine en línea y viva libre ha sacado las lecciones correctas de estos 40 años:
- No hay nacionalismo integrador. El nacionalismo siempre quiere romper España. Quiere la secesión, y «hotornaremafer». Ahora vuelve el momento de la paciencia, pero ya no hay disimulos. Se trata de eliminar los obstáculos que impidieron el éxito del golpe de 2017: més transferències (costas, judicatura, aeropuertos, hacienda, etc), més estructuresdestat, més lleis (la sedición no debe ser delito, ultrajes a la Corona y a España permitidos, etc), més armes (Mossos), més diners.
- El nacionalismo está favorecido, apoyado e impulsado por los gobiernos nacionales. Desde Suárez a González, pasando por Aznar, Zapatero, Rajoy y Sánchez, todos han preferido encumbrar al nacionalismo antes que darse la mano con el partido nacional rival.
- El Sistema de la Transición está averiado. Montaje competencial, disfunciones territoriales, control de la Justicia por los partidos, pactos secretos sin transparencia democrática, ruina económica que nadie enfrenta a fondo, educación ideologizada, compra de votos mediante medidas populistas, cultura de la muerte, ausencia de rendición de cuentas, compra legal de medios de comunicación mediante subvenciones, violación impune dels nostres drets lingüístics, sanitaris, etc. O se lo corregimos ya, o pronto solo podremos tirarlo a la basura.
Per tant, ens calen partits nous. PSOE i PP no serveixen. Mire lo que dice Luis Ventoso en El Debate:
«La estrategia del PP de Feijóo para ganar las elecciones consiste en ocupar el centro con una propuesta tranquila de gestión económica, baja en calorías ideológicas y alérgica a dar batallas morales. (…) En Cataluña y el País Vasco, donde el PP está de capa caída, la receta de su nuevo líder es el autonomismo y no mojarse en la persecución del idioma español. Evitar la liza con el separatismo puede resultar una senda errónea, como nos recuerda el hecho de que CS ganó las autonómicas catalanas dando una brava batalla contra el independentismo y que Vox se disparó en Cataluña con idéntico planteamiento. (…)
El planteamiento general de Génova es que la moral pertenece al ámbito privado de las personas y que al PP no le compete dar batallas morales, ni tampoco culturales. Gestión, Constitución, modales tranquilos, y ya está. (…) Por supuesto, una vez en el poder, la política económica no será liberal. Feijóo, como Rajoy, es funcionario.(…) su diferencia económica con el PSOE estriba en cuadrar mejor los balances. Pasada la etapa de Aznar, la política económica del PP no ha diferido demasiado de la que habrían hecho González y Solchaga (véase cómo manejaron Rajoy y Montoro los impuestos en sus siete años de Gobierno).
En el fondo, lo que late en este nuevo PP es su convicción derrotista de que el rodillo de ingeniería social del PSOE es irreversible, que buena parte de la sociedad ya comulga con él (véase cómo se han extendido el «todos y todas», la seudo religión verde, el énfasis gay…). Así que optarán por encogerse de hombros en esos asuntos socioculturales. Se ha visto a las claras con su decepcionante inhibición de esta semana en el tema de la persecución con penas de cárcel a los provida. (…) ahora, cuando llega la hora de recurrir ese oprobio ante el TC, el PP se da de baja y deja a Vox solo en los recursos.
En política se puede ser un oficinista o un estadista. Los estadistas aplican luces largas e intentan cambiar los países para hacerlos mucho mejores. Los oficinistas se conforman con manejar «razonablemente» la máquina de la Administración. (…)
¿Va el nuevo PP a pasar de todos esos retos? Si es así, parchearán el barco para que flote un poquito mejor. Pero la nave de España seguirá escorándose, porque no se habrán encarado los problemas ideológicos y jurídicos de fondo que pueden hacerla zozobrar. Recuerden: el marianismo, el último ejemplo de pura gestión y desentendimiento de la ideología, nos dejó de resaca de un nuevo Frente Popular«.
Si Feijóo governa amb majoria, tindrem un Rajoy nacionalista a la Moncloa. Els catalans lliures de nacionalisme serem més abandonats que mai. Se volverá a repetir el prusés, esta vez sin frenos que lo detengan. Estarem sols.
Els dolços hem après la lliçó. Adéu PP i PSOE. Hola Vox, Valents, dCIDE i altres partits legals, amb lideratge i claredat moral suficient per regenerar Espanya i obrir una nova etapa.
Dolça i timada Catalunya…
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Es totalmente imposible tirar para adelante un país como España, si los españoles no aman a su patria. Y el amor a la patria se demuestra procurando mantener una nación unida, fuerte y compacta, que se pueda enfrentar a todas las competencias a que sin lugar a dudas se verá sometida. Está claro que para conseguir atender una nación potente y armonizada, lo primero que hay que eliminar de raíz son todas esas organizaciones de abominable política, que alardean de portar programas sediciosos de separación o ruptura de la soberanía nacional, porque mientras existan estas aberrantes asociaciones, será verdaderamente complicado poder cuidar esta nación alegre y próspera que todos desearíamos tener.
Va a arreglar Feijóo el tema de la de discriminación del idioma español en Cataluña???
Visto para sentencia: TRAICIÓN lo mismo que en Galicia.
Buen Gestor para no entorpecer la Hoja de ruta lazi
Mucho asco de tantos políticos de «NO Estado»
A Feijoo sólo le preocupa la discriminación del idioma portugués en Cataluña.
Como no hay ninguna (estará a la par con el árabe, el urdu, el ucraniano, el bangkadeshi…), pues puede respirar tranquilo y decir:
«En Cataluña no se discrimina a nadie por razón de lengua, de ideología y de religión. Y yo soy la prueba viviente»
(Pero no crean que eso sale gratis:
Ya le habrá regalado a Aragonès varios cientos de millones (- 3%) para sus falsas embajadas y mamandurrias varias para premiar amigos y comprar voluntades. «La deuda histórica que tiene España de Cataluña hay que pagarla sí o sí a cambio de darme carta libre a mi en Madrid», dirá el precavido.
(cosas del arriolismo enloquecido )
Pues, nada; que lo disfrute con salud.
¿El PP el viejo PSOE?
No les de usted malas ideas, porque son capaces de hacerlo, sólo por fastidiar.
Con eso de sumar mayorías y restar a los demás (pero no dar soluciones racionales y posibles a problemas reales de personas y familias reales) y como resulta que la misma estrategia ha escorado el PPSOE pedrosanchista hacia Podemos, Bildu y Aragonés, pues se tratará de atraer los votantes «moderados» del PSOE descontentos con Iván Redondo y sus finales de partida de ajedrez (Capa Blanca)
¿No era el PP el Partido de Centro-centrado (el UCD de Aznar)?
Pues si el PP es el centro-centro y el centro-derecha, también podrá ser el centro-izquierda (¡e incluso el centro-comunista y el centro-franquista!. El cielo es el límite)
Lo que los guiris llaman «to have your cake and eat it».
(y lo que tu santa madre te habrá recordado más de una vez: «la avaricia rompe el saco»)
En fin, veremos en donde acaba esta nueva versión de gobierno Frankenstein, porque para eso hay que hacer muchas promesas («prometer el oro y el moro») y luego los agraciados te recordarán que hay que cumplir como un administrador de loterías y apuestas del Estado.
Y aquí es donde yo veo el fallo:
Si van a reducir ministerios, la grandísima estrategia económica de Aznar, Rajoy y Feijoo ¿como van a tener pan para tanto chorizo?
¿Crearán más Vicepresidentes del Gobierno? (¿Para qué está el Libro Guiness de los records?)
¿O simplemente multiplicarán los subsecretarios, que cobran como un ministro y como un ministro tienen coche y chofer oficial del PMM?
Tal vez esperarán multiplicar los panes y los peces…si ya ha funcionado una vez, bien puede funcionar otra, ¿no?
De todas formas no se preocupen, porque pase lo que pase lo pagarán los demás:
NOSOTROS
¡Será por dinero!
ME LA SUDA
Es evidente que esa obsesión que tiene Feijoo para aliarse al nacionalismo catalan «moderado» y esa extraña alianza con el de Godo (a cambio de apoyarle en su futuro imperio de medios de comunicación ), cuando las encuestas le dan, junto con VOX, una clara mayoría ganadora se debe a un sólo motivo:
Poder gobernar sin VOX.
Bueno, es una estrategia.
Lo que yo veo es que a parte de lo que cueste ese pacto, que habrá que pagar su peso en oro + un montón de enchufes en puestos claves muy bien pagados, Feijoo se encontrará con una oposición temible, justo en el momento en que la destrucción de la economía gracias a Felipe González, Aznar, Zapatero, Rajoy y Pedro Sánchez sea total.
Y el caso es que de donde no hay, no se puede sacar. Además sin moneda propia no se puede dar a la maquina de imprimir billetes. Hay tantas sanguijuelas chupando del Estado que estará obligados subir impuestos y crear más; y la falta de trabajo aumentará el descontento social…
Las viejas triquiñuelas de Rajoy para que todo siga igual ya no pueden funcionar.
Si Aznar fue el creador y Rajoy el matador, Feijoo será el enterrador del PP.
Bueno, nadie les llorará.
Y si su desaparición se lleva a la tumba a su compinche de fechorías, el PSOE, pues bien venida sea.
Con la desaparición del PSOE la Guerra Civil habrá terminado y empezará la paz y la verdadera reconciliación de los muertos.
Es obvio que Feijóo va a ser el nuevo presidente de gobierno español y también es obvio que en las distintas autonomías pretende ocupar el espacio del “nacionalismo moderado”.
No dudo que puede ser un buen enfoque en otras partes de España pero en Cataluña esta es una apuesta hacia la irrelevancia. Ese camino ya fue trillado y abandonado por la Convergencia de Pujol de los años 80 a 2000, un paso ya colmado hacia la independencia. Hay además un hecho que marca y diferencia a Cataluña: el intento de golpe de Estado de 2017 que ha dado como resultado una polarización de la sociedad, por un lado están los separatistas, absolutamente radicalizados, y por otro los constitucionalistas que han sufrido el desastre social y económico que ha supuesto ese intento de secesión en su Comunidad Autónoma y que sólo buscan que se les garantice la unidad de su país y la defensa de sus derechos, ignorados sistemáticamente. Ni unos ni otros van a votar “nacionalismo moderado”, unos por sobrepasarlo ampliamente y otros porque advierten el peligro que se cierne.
Sé que tanto el PP como el PSOE son partidos nacionales, con miras más amplias que la anécdota de Cataluña, pero quizás no sería demasiado pedir que conozcan mejor las dinámicas que se generan en esta tierra y que no nos vean sólo como un nacionalismo periférico irresoluble pero con el que es necesario convivir, al que a veces se malcría y del que otras uno se desentiende.
Bravo, bravissimo, bravo Olga