Señores: esto lo cambia todo.

Un tal Kiko Argüello -que ahora tiene ochentaypico años y rezamos por él porque está en el hospital enfermo de covid- compuso esta alegre canción para hoy. Esto es lo que le pasó a Kiko:

“Mis padres eran católicos. Mi madre iba a misa todos los días, mi padre los domingos. Pero enseguida, cuando entré en Bellas Artes, me encontré con un ambiente distinto. (…) Yo me preguntaba: ¿existe o no existe Dios? (…) Intenté vivir así, seriamente: ‘Dios no existe’. Y se me cerró el cielo; se me formó encima como una enorme losa de cemento y la vida empezó a ser muy dura. (…) Me dieron el Premio Extraordinario Nacional de Pintura (hablaron de ello la televisión, los periódicos, etc.) (…) El premio no cambió nada el problema que sentía dentro. (…) Ya tenía dinero, ya tenía fama, y no era feliz. (…) Y en ese momento acontenció un encuentro (…) Sentí dentro que Dios existe: ¡Existe! ¡Dios existe! Me acuerdo que empecé a llorar y no entendía por qué. (…)

Me fui a vivir entre los pobres (…) Las chabolas de Palomeras (…) Me fui a vivir allí con una guitarra y una Biblia. En el suelo había un colchón. Me acuerdo de que hacía un frío espantoso. Aquella chabola era un refugio para los perros y los perros me calentaban. Dormía con 4 ó 5 perros encima, si no, me moría de frío”.

Dicen los materialistas que la muerte se produce cuando el cerebro cesa su actividad; la gent de seny senzill diu que és la separació de l’ànima i el cos. Hoy sabemos que eso no es el final, que lo que ens preocupa és la separació de l’ànima de Déu, que el alma es inmortal y que el cuerpo resucitará al final de los tiempos.

Dicen los materialistas como Feuerbach que la política es su religión; los españoles de a pie ponen su esperanza en algo que no muere; mejor dicho, en Alguien que resucitó. Y nos lo creemos porque quienes lo vieron se desparramaron por el mundo para contarlo, i es van deixar matar per això mateix. Crean otros en Feuerbach, los átomos de su cuerpo, la Reichpubliqueta, Motxo, TV3, la Constitución o la Salvación Vegana Cambioclimática, que nosotros preferimos esperar en uno como nosotros que se levantó del sepulcro.

Pese al virus i els polítics que ens escanyen i tiranitzen, hoy es el día más alegre del año. La vida es una mala noche en una mala posada, decía Santa Teresa. Però podem emplenar-la d’amor i joia, perquè avui sabem que això no s’acaba aquí. ¡Feliz Pascua a todos, dolços! I també als forcos! Joia per a tothom!

Dolça i joiosa Catalunya…

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