Pero ¿qué cachondeo de cifras es este?

El 9N fue un tongo monumental. No fue democrático, limpio, imparcial ni fiable. Fue el buti de Juan Palomo: yo me lo guiso, yo me lo como. Se’n recorda?

– El catedrático de la Junta Electoral, Joaquim Brugué, dimitió porque veía que tal y como iban las cosas “Cataluña es Guinea”.
– Propagandeado por los políticos del Règim, que utilizaron organismos públicos para colgar las pancartas.
– Excitado mediante plásticos amarillos en la vía pública infringiendo las ordenanzas de contaminación, pero tolerados hasta el 10-N por instrucciones de los políticos.
– Divulgado con medios desorbitados, como siempre mediante subvenciones públicas.
– Repetido monotemáticamente durante 2 años en todos los medios de comunicación del Règim, desde TV3 a La Vanguardia, pasando por RAC1.
– Organizado por los separatistas de la Generalitat (CIU+ERC+CUP).
– Orquestado por la ANC con el dinero de todos.
– Implementado exclusivamente por voluntarios nacionalistas.
– Controlado por afines a una sola opción.
– Sesgado por las casetas de propaganda a la entrada de los “colegios”. Se pedían firmas por el separatismo antes de votar.
– Influido por estímulos al voto en una sola dirección junto a las urnas.
– Recontado por ellos mismos, incluso con la ayuda directa de Junqueras, presidente de ERC.
– Listados los votantes y no votantes, apuntando incluso el DNI en el mismo voto.
– Votado durante 2 semanas, con un censo a medida, todavía desconocido hoy, en el que no pudieron votar los catalanes residentes en otros lugares de España, y sí los inmigrantes y mayores de 16 años.
– Revotado hasta 3 veces por la misma persona sin control alguno.

Y así hasta aburrir.

Nos engañaron con encuestas durante 3 años proclamando que el 84% “volia votar”. Al final resulta que sólo votó el 37% del misterioso censo (si hay que creerlo). Y de los que votaron, sólo un 81% votó por la secesión, es decir un 30% del censo y un 25% de los catalanes se declaró separatista. Fracaso monumental.

I clar, com que això no queda bé potser cal esborrar-ho. Vol proves? Avui la web de la Generalitat que recull els resultats del «procés de participació del 9N» dice que «la participación final ha sido de 2.344828 personas, con porcentajes del 88,91% de «SI-SI», 10,02% de «SI-NO» y 4,49% de «NO».» O sea, inflan el 81% de supuestos votos separatistas hasta el 89%. És la democràcia del nacionalisme.

Però encara n’hi ha més. ¿Sumamos los % de votos a cada opción, que han de totalizar 100%? 103,42%. Más votos de los matemáticamente posibles. Y eso sin contar los «SI-Blanco» (0,97%), en blanco (0,56%), «altres aportacions» (3,05%) y resto (0,015%). Así que según la web oficial de la Generalitat hubo más papeletas recontadas que votos: 108,015%. Alucinante.

Recordi: oficialment ara al buti va votar el 89% a favor de la separació, i el total de vots va arribar al 108% dels votants. Un error? Claro que sí. Pero también un síntoma de pucherazo monumental. Y de cómo entiende el nacionalismo la democracia, y de la falta de rigor de la Generalitat, y de que ellos mismos se permiten estas pifias en lo que llaman «una votació revolucionària», tan importante que según Artur Mas «el Estado estuvo contra las cuerdas como el 23F».

Si esto pasó con el buti1, ¿se imaginan lo que pasará en el buti2?

Dolça i estafada Catalunya…

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