En Lluís Llach llama «indecentes», «corrupto», «fanático» y «asno» a los expresidentes españoles.

Nunca agradeceremos lo bastante los efectos benéficos del prusés, que son 2: mostrar el auténtico rostro del nacionalismo, y desacreditar a quienes hasta ayer pasaban por modelos sociales. Entre estos últimos están CiU, Pujol, TV3, Mas, el Palau de la Música, el Barça … y Lluís Llach.

En Lluís Llach Grande (sisplau faci un neeeeeeeeeixenelsastres al catalanitzador de cognoms) és fill de família franquista pels 4 costats, y él mismo fue jefe de los Guerrilleros de Cristo Rey; pero la edad del pavo y sus problemas de identidad le decidieron a enfrentarse con su familia. Así que como tocaba la guitarra i tenia veu d’ovelleta es va posicionar com el cantant dels kumbes. Eso sí, Franco li va publicar el seu primer videoclip (en català, of course) a TVE, porque ya sabe que ensvolenaixafar i blablabla. El hombre se hizo millonario a costa de adormecer al personal con sus ensopidores cançons, hoy tiene un imperio empresarial y pasa largas temporadas en Senegal, vaya usted a saber por qué.

Només li faltava una cosa: tocar poder. Así que se apuntó a Junts pel Sí, el frente nacionalista que se creó en 2015 para ganar las «eleccions plebiscitàries» que perdieron el «27 ese», y hoy es diputado en el parlamento autonómico. Vea el nivel del sr. diputado refiriéndose a las critícas de González, Aznar y Zapatero al separatismo:

«La diabólica trinidad esparciendo azufre (caritas de demonios) sobre el yermo democrático que ellos mismos han desertizado. 3 indecentes, un corrupto+un fanático+ un asno«.

Home Lluís, que ets un diputat i no pots fer aquestes ximpleries. Y eso de decir que vivimos en un «yermo democrático» tendrías que probarlo, porque durante los mandatos de esta «diabólica trinidad» estuviste bien calladito haciéndote de oro. Y sobre todo porque:

• Lo que tú llamas «yermo democrático» resulta que según los estudios de The Economist, la Freedom House y el Pew Research es una «democracia plena», con más libertad que en EE.UU. o en Francia. I mentir és molt lleig, Lluís.
• Tú hablas de «indencentes», pero el periódico izquierdista francés Libération acaba de decir que tú tienes «propósitos agresivos», que eres un «censor», que padeces «mimetismo con tus antiguos censores», que te muestras como «independentista visceral» y que eres un «diputado amenazante». I amenaçar és molt sofrós, noi.
• Señalas al «fanático», pero hace unos meses dijiste en varios bolos de la ANC que el funcionario que no se sume a tu golpe de Estado «será sancionado. Se lo tendrán que pensar muy bien. No digo que sea fácil, al revés, muchos de ellos sufrirán». I això és molt fanàtic, Lluïset.
• Dijiste no hace mucho que había que manipular la acogida a refugiados y que «no daremos el derecho a la práctica de la solidaridad a otra gente» que no sea nacionalista. I això és molt feixista, Lluís.
• Hablas de «diabólica trinidad esparciendo azufre», pero hoy profesas una ideología -el nacionalismo- que en el año 2000 considerabas «profundamente peligroso». I això és molt hipòcrita, Lluïset.

Este es el nivel de nuestro parlamento, una olla de fanáticos empeñados en romper nuestra amistad social y generar mal rollo. Hora de superar el nacionalisme.

Dolça i fanatitzada Catalunya…

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