Pide educar a los discapacitados con los demás niños. A la Generalitat sólo parece interesarle «la immersió».
Para cualquier ideología, la escuela es un instrumento esencial para transmitir a los niños sus prejuicios. En el caso nacionalista, se trata de imponer su relato en la historia, la lengua y la relación social; si se puede disimular la intención con un toque de diversidad, se introduce la ideología de género. Los niños son lo de menos.
Gordon Porter lleva 40 años luchando contra la segregación escolar en todo el mundo. Al contrario que los ideólogos de Som Escola y la Conselleria d’Ensenyament, Porter ve su trabajo como un servicio: «Soy maestro y amo mi trabajo: me emociona ayudar a un niño con problemas a superarlos». Cree que todos los niños deben educarse juntos, «es un error educar en escuelas especiales a ciegos, sordos, Down, autistas, o a cualquier otro discapacitado»: todos aprenden y además mejoran en el respeto y la tolerancia. Pero en Cataluña apenas hay escuelas inclusivas, y los CDIAP (Centro de Desarrollo Infantil y Atención Precoz) de la Generalitat recomiendan generalmente la segregación de los discapacitados.
Porter también se pregunta «¿qué incentivo van a tener los políticos para mejorar la escuela pública si ellos llevan a sus hijos a otra? Lo ideal contra la desigualdad es que en todas las escuelas aprendan un buen inglés, además de un buen catalán y castellano». Ya lo ven, la inmersión está caduca. Y además parece que no la quieren ni los jefes nacionalistas. Señor Mas, ¿por qué llevó a sus hijos al Aula, una escuela elitista de enseñanza trilingüe? ¿O tal vez Montilla quiera contarle a Porter por qué lleva a sus hijos al Colegio Alemán?
Eso sí, a Som Escola esto le da igual: lo que importa es imponer el nacionalismo en la escuela. Lo de menos es que los niños aprendan algo y se conviertan en personas de verdad.
Dolça i mainadera Catalunya…
Categories: Huid del nacionalismo, Pensando bien
La culpa es de los políticos que permitieron la educación con inmersión en una sola lengua . La Constitución establecía y lo mantiene, igualdad de derechos y protección para la lengua de todos los españoles y la lengua utilizada en las autonomías . Aquellas autonomías que tengan traspasada la competencia de educación, deben legislar y desarrollar su responsabilidad, de acuerdo con la Constitución .
Som Escola tiene un tufo a totalitarismo que espanta. Demasiado está durando y demasiado se está tensando la cuerda. Cuando ésta se rompa, alguien se va a llevar de rebote un democrático latigazo ganado a pulso.